DESPUÉS DEL ADIÓS
Por qué no tenderse boca arriba simplemente
y mirar el cielo el cielo azul
el cielo limpio de nubes y de pájaros
de ángeles y demonios mirar mirar el cielo
Y esas nubes y pájaros esos ángeles y demonios
se te podrían pasar por la cabeza
podrían rayar el cielo de tu mente
como una tiza blanca raya un pizarrón azul
y dibuja unas nubes y unos pájaros
unos ángeles y demonios
hasta que un gemido suave un leve llanto
los desordene y los desplace
Entonces las nubes se sacudirán las plumas
los pájaros empezarán a llover
les crecerán cuernos a los ángeles
y los demonios se adornarán con brillantes aureolas
a las cuatro de la mañana
cuando todavía estemos dormidos o despiertos
y no hay nada más que hacer
Óscar Hahn