ADIÓS
A Regina Szymonska
Tuerces rumbo, —el tren arranca,
viajadora
hija de la estepa blanca.
Adiós, señora.
Exotismos deliciosos
tienen tus ojos cambiantes,
—grandes turquesas que brillan
como si fuesen diamantes—.
En tus ojos cantan rimas
y paisajes de bohemia;
hay montañas... y en las cimas,
como lluvia de algodones,
se distingue un blanco vuelo
de ilusiones.
Tuerces rumbo, —ya vas lejos...
Tu blancura se destaca
entre los campos bermejos.
Adiós, polaca.
1901.
Rufino Blanco Fombona