AHORA
A Jesús Aguado
De Dios es este instante,
y él lo ignora.
Es polvo del cristal de la alegría.
Es la rosa que encaña
de la sangre en su entera majestad.
Bien se ve que sabéis de la honda llaga,
de este andar a derechas
sobre la brasa pura.
¿Morir?
Mira ahora estas manos,
mira en ellas el pan
de un tan loco querer, 1
de una harina tan limpia.
Vicente Gallego
1 Este penúltimo verso es suprimido en la edición consultada de «Dios en la poesía actual» de Carmelo Guillén Acosta y José Julio Cabanillas Serrano.