ADRIANO
Adriano observaba las columnas de Trajano
bajo la cúspide inmortal del monte Palatino,
tantos siglos de gloria para tantos milenios de olvido,
nadamos en la falsa libertad del sometido .
Muros rosas en el crepúsculo
florestas germánicas
landas bretonas
lavandas gálicas...
acrópolis abierta en flor
como el cáliz al tallo
limitada por su misma perfección.
Los pueblos han perecido hasta ahora
por falta de generosidad,
la esclavitud existe aún
pero con otro nombre
y menor filosofía,
somos vergonzosamente ricos
y desesperadamente pobres,
el pequeño especulador
acapara todo el aceite
en una ignota aldea griega,
Herodes Atico tras Herodes Atico
la vida se detendrá como un capricho
y quedará la espada atisbada
sobre la cabeza de estos explotadores,
al soberano solo le quedará la vergüenza
y apenas unos denarios de gracia,
solo otro poco de ilusión en los oráculos
pero no creo que Júpiter Amón, Castalia o Doliqueo
se apiaden ya mas de nadie.
Hugo Nicolás Taglia